miércoles, 30 de octubre de 2013

:: Constitucional ::

Desde LADORREGO AM1470-COOPERATIVA DE TRABAJO DE SERVICIOS AUDIOVISUALES Y TESTIGOS DE PRIVILEGIO celebramos el fallo de la Suprema Corte de Justicia de La Nación que declaró CONSTITUCIONAL la ley de Servicios de Comunicación Audiovisual sancionada hace cuatro años. 
Una larga lucha que merece ser festejada por quienes bregamos por una comunicación en la que se expresen todos y todas


Entrevista del sábado 26 de octubre

El sábado, entrevistamos en los estudios de La Dorrego, a RICARDO FONSECA, pintor bahiano radicado en Dorrego e impulsor de la Galería Fonseca.


lunes, 28 de octubre de 2013

Primera persona (del plural)


Por Eugenia Madera- Programa del sábado 26 de octubre.



No suelo utilizar la primera persona para este espacio. Sobretodo por el poco interés que puede revestir para ustedes, pero esta vez voy a romper esa máxima, porque me siento una testigo de privilegio de esta época, de este momento y me toca directamente.
El martes 22 de octubre no fue un día más para el calendario de mi vida y la de Agustín. Ese día, a las 8 de la mañana preparamos un mate con miel y prendimos la computadora para ver por la tv pública online, (es una decisión no tener tv y por jactarme de esto recibo las bromas de mis amigas) el sorteo por lotería nacional de los créditos para la vivienda única familiar Procrear.  Ya nos habíamos anotado el año anterior para los créditos sin terreno, es decir, aquellos que utilizan tierras fiscales en disponibilidad. Pero en la ciudad que elegimos para vivir hace unos años, aún no hay terrenos disponibles y los que hubieron fueron rechazados por los vecinos aledaños por no aceptar la construcción de un “barrio popular” cerca de sus casas. No sucedió sólo aquí, la junta de firmas para la no llegada de beneficiarios del ProCreAr se dio en varias ciudades… Decía entonces, esta vez nos habíamos anotado para la compra de terreno y construcción de la vivienda, una de las líneas nuevas. Más allá de las probabilidades reales que eran muchas ya que los créditos disponibles superaban el tercio de los inscriptos, teníamos desde hacía unos días, la firme convicción de que saldríamos sorteados. Nos había llegado el correo electrónico de la ANSES con el número de sorteo, que era el 2, el número de grupo que era el 566 y nuestro número que era el 22. Veíamos caer las bolillas para las otras líneas de crédito que se sorteaban, los repechajes de sorteos anteriores en sus líneas de construcción con terreno y refacción y ampliación. Mientras oíamos cantar los números, recordaba que en mi infancia allá por el año 93, con ocho años,  toda la familia se había levantado muy temprano para escuchar por radio nacional el sorteo del servicio militar para uno de mis hermanos primero y unos años más tarde para el otro. Pensé en la ansiedad y angustia de aquellas bolillas y la ansiedad y felicidad de éstas. Prórroga y sufrimiento del Soldado Carrasco de por medio, mis hermanos no hicieron la colimba como siempre le dijo mi padre, que sí la hizo. La comparación de sorteos, compara la diferencia de momentos históricos, de proyectos colectivos. En fin…
Cada cual se fue a cumplir con las obligaciones del día. En mi caso, cada diez minutos actualizaba la página web de la lotería nacional desde el teléfono para saber si ya estaban los resultados. Al mediodía es él quien me llama gritando que estaba viendo en vivo que el 22 había salido y que nuestro número de grupo permanecía color verde, eso significaba que aún tenía cupo y que habíamos salido sorteados. No sé si el total de sorteados lo vivieron con la emoción y la alegría con la que lo vivimos nosotros, pero advertí que esto era en primera persona. La posibilidad de una casa en esta ciudad que elegimos para vivir era tan remota, tan pequeña que directamente no contaba como posibilidad. El problema de la vivienda en el país no viene de ahora, es estructural y este programa viene a cuento a la solución de ese problema, lenta, paulatinamente, claro. Nadie dice que esto sea de la noche a la mañana. De hecho hace un rato les conté que antes, ni bien se lanzó el programa en el Museo del Bicentenario con la Presidenta a la cabeza, acto en el que estuve presente, junto a muchos más que creíamos que era una gran noticia y que había que apoyarla, nos habíamos anotado vía web también en una línea que aún no ha resultado en esta ciudad, sí en otras. Pero las dos nuevas líneas que se sortearon el martes son muestras de que el programa sigue avanzando, para llegar a todas las necesidades habitacionales, o al menos a la mayor cantidad. Esa misma tarde comenzamos a enterarnos de gente conocida que estaba en nuestra misma situación. Susana, va a poder arreglar su casa y Emma construir una casa para vivir con su hijito en Mar del Plata. Guadalupe que el año pasado se volvió a Jujuy salió sorteada allá. Lo mismo le pasó a Carolina en San José, Entre Ríos. Y en La Plata para las diez de la noche los conocidos eran como para hacer dos manzanas. Ex compañeros de la facultad, amigas como Eli y Nadina con las que la charla sobre el precio de los alquileres era un tema recurrente, amigos de la primaria, el primo de tal, el hermano de la cuñada, y así se repetían las historias y las felicitaciones por las redes sociales.
Alguien hizo la comparación, absolutamente atinada, de que los titulares de los 158 mil créditos sorteados llenaban dos estadios de River Plate. Monumental. Y eso que no estamos multiplicando las parejas, los hijos y las hijas, las familias de esos titulares.
Ya tenemos el turno en el Banco Hipotecario, ahora resta completar la documentación para el otorgamiento del crédito, luego conseguir el terreno en venta que no supere los 100 mil pesos. Además de brindar trabajo a quienes trabajen en la construcción de estas casas que luego serán hogares. Todas las condiciones están pensadas para que no se produzca una burbuja inmobiliaria, sino por el contrario contrarrestarla al ponerle un tope al valor de la tierra.  
El crédito se desembolsa en cuatro pagos, bajo la presentación de avances de obra y durante los nueve meses que debe durar la construcción, por ser una modalidad de crédito francés, no se paga la cuota del mismo. Lo que nos permite a los inquilinos, seguir pagando el alquiler del departamento donde vivimos hasta mudarnos a la nueva construcción. La cuota no puede representar más del 40 % de los ingresos del grupo familiar, con lo cual resulta inferior a cualquier alquiler. Además, la tasa es fija durante los primeros años y variable con un tope según los ingresos. Hay 30 años para cancelar el crédito en el primer estadío y 20 en los siguientes. Sin adentrarnos demasiado en el problema de los alquileres, los contratos de alquiler son por dos años, y además del aumento del 20 por ciento año tras año, la renovación del acuerdo cada dos años insume un porcentaje del contrato total que es sólo interés financiero. La especulación con las viviendas llega a niveles insospechados. Por eso la protección del Estado resulta fundamental.

“El saber que no estamos solos, el saber que luchamos por lo mismo, hizo que ayer (por el 22) nosotros, y mucha gente más, conocidas y no, creamos posible el sueño de tener “tu propia casa”. Pero entiendo que es un logro colectivo, ya que por nosotros solos no lo hubiésemos logrado, es por esto que les escribo para agradecerles por confiar en nosotros y darnos la posibilidad de acceder a nuestra casa. A ustedes como gente, como pueblo y como Estado, ya que entiendo que el Estado somos todos y todas” Eso escribió Agustín al otro día y sintetiza lo que es el Procrear para nosotros.  

sábado, 26 de octubre de 2013

COLUMNA PROGRAMA SABADO 26




Es tiempo... ya somos adultos 
por
Gustavo Marcelo Sala
www.lasbalasdelcampanario.blogspot.com.ar


Treinta años de Democracia. No es para nada desdeñable en el marco de una sociedad cuya historia está delineada por guerras intestinas, desencuentros permanentes y razonamientos lineales. Algo más de un cuarto de siglo es suficiente tiempo para comenzar a comprender que la adolescencia ha quedado en el pasado. Todavía solemos escuchar la vaga falacia que afirma estar transitando el sendero de un proceso joven. Creo que se trata de una afirmación ciertamente conformista que apunta más a justificar los pendientes que adjudicarse alguna responsabilidad por las omisiones que el colectivo social tiene deseos de ocultar. En menos de ese tiempo y sin la actual tecnología cientos de fenómenos sociales y políticos se han desarrollado a lo largo de la historia. Enumerarlos sería tan engorroso como fatigante, aunque puntualmente esclarecedor.
La permanencia y la estabilidad pasan de piso a techo sin solución de continuidad. Por ellas no somos capaces de arriesgar nuestros destinos a favor de procurar un orden más justo y equitativo.
Cualquier intento de cambio substancial parece amenazar aquellas características que algunos insisten declamar como precarias. Toda situación crítica es vista como una amenaza al sistema y no como lo que realmente es: Una enorme posibilidad de estudio, debate y crecimiento. De ese modo, permanencia y estabilidad logran entidad de paradigma por sobre las demás urgencias de la sociedad. Así, lo obvio e indiscutible está diariamente sometido a fantasmales conspiraciones por los intereses dominantes.
Se suele afirmar que la democracia es el más óptimo de los ordenamientos políticos existentes, pero a la vez, se procura no ascender el tenor intelectual y político para repensar otro sistema superador, con mayor base participativa, que contemple las falencias que la misma democracia ostenta endémicamente. Por caso su afán contradictorio por sepultar al mundo de las ideas presuponiendo que estas contribuyen a la atomización de la sociedad. Lo curioso es que al mismo tiempo se presume que el sistema garantiza la libertad de pensamiento y opinión. Nuevamente el piso y el trecho se dan la mano, lo obvio como formato y paradigma. Lo que luego de treinta años debería asumirse como normal y cotidiano, es mostrado todavía como elemento fundacional.
Con la Democracia, per-se, no se come, ni se educa, ni se cura. Con todo respeto y admiración lamento disentir con el recordado alegato humanístico del ex Presidente Raúl Alfonsín. Se come con la justicia social y la distribución equitativa del trabajo y la riqueza, se educa con una profunda inversión hacia tales efectos, desde lo cultural y lo científico, y se sana con centros de salud calificados, tecnológicamente avanzados, servicios socializados y profesionales de excelencia. Es aquí en donde comenzamos a descubrir aquellos techos inaccesibles. Cielorrasos que la democracia no intenta acercar debido a que sus presupuestos siguen destinados a fines determinados.
Se asegura que la democracia es perfectible dado que está ligada a un instintivo proceso evolutivo y que la ambición del hombre por superarse hará que su camino apunte, sin prisas pero sin pausas, al progreso de la sociedad. Estos treinta años demuestran todo lo contrario, haciendo la salvedad que podemos interpretar dicho proceso evolutivo del mismo modo que lo hizo Darwin a través de su teoría de selección natural. Hay un momento en la vida de los seres vivos que tanto respirar como sudar forman parte de actividades mecánicas que si bien están automatizadas intelectualmente su desarrollo no requiere trabajo racional, no son sometidos bajo amenaza de riesgo. Está instalado que la democracia necesita que sus mecanismos básicos, es decir su piso, se encuentre permanentemente exhibido como logro máximo.
Los sistemas democráticos de principios del siglo XXI no lo son en su esencia, en su espíritu, sino en sus formas y maquillajes. El sistema de salud no es democrático, al igual que el educativo, el laboral, el habitacional y menos lo es el concepto de propiedad, variables sujetas a los humores del mercado.
No existe peor categorización que la creada por la misma democracia: La idea de incluidos y excluidos. Ambas forman parte de un todo en donde la voluntad de elección y los deseos individuales poco hacen al nudo de la cuestión.
Vivimos un presente en donde el capitalismo y la globalización están por encima de la democracia y ésta acepta apaciblemente estos comprobados y crueles liderazgos. Dichos intereses nos argumentan a diario que este sistema es el mejor en tanto y en cuanto no se le exija a sus mecanismos la revisión de la siniestra variable costo/beneficio. Algo similar ocurre con la variable Seguridad Jurídica; ésta será exigida y/o valorada siempre y cuando no interrumpa las liberales y “democráticas” reglas del mercado. Los excluidos presionarán por sus carencias, ausencias estructurales que los incluidos nunca tendrán la seria voluntad (conciencia de la ignominia) de modificar porque les variaría substancialmente los privilegios obtenidos. La oferta y la demanda como eje de discusión y como ordenamiento social.
Groucho Marx decía que “la política es el arte de buscar problemas, encontrarlos, hacer diagnósticos falsos y aplicar remedios equivocados”. Sin estar afiliado a la ocurrente ironía, en oportunidades uno observa que algo de eso ocurre.
La ciencia política no tiene la culpa de sus operadores y las libres interpretaciones que de ella se hace. Pero en la práctica se me ocurre que el placebo de la libre expresión es utilizado con demasiada insistencia como mágico medicamento que cura todas nuestras penas terrenales; como la única aspiración ética a conservar.
Un sistema que ampara la ignominia social no hace otra cosa que buscarse un problema, si al mismo tiempo cree que las causas no están sujetas a la reglas del mercado el diagnóstico resultará falaz; si para peor se considera que el remedio adecuado es el ajuste y ceñirse a recetas individualistas y voluntaristas completa a la perfección el circuito ironizado por Groucho.
Tomemos por caso la tan mentada inseguridad, la baja en la edad de imputabilidad y demás yerbas, con la prevención de no ingresar a la definición contemporánea de delito, cosa que profundizando resulta mucho más compleja de lo que sentencia la vulgaridad que frecuentemente presenta el sentido común. Por estos tiempos Thomás de Quincey hubiera sido un reo de la más baja estofa por su marcada y pública afición al opio.
Volvamos al punto. La marginalidad es el evidente y necesario caldo de cultivo para romper el contrato social que la misma democracia declama. Al aceptar con mansedumbre el ordenamiento del mercado no hace otra cosa que incluir el problema de la inequidad. Se prefiere no interpelar los causales sólo sus consecuencias, entendiendo que atacando a éstas se logra silenciar el dilema. Aumentar penas, cercar a los sectores con mayor tensión social mediante ejércitos de gendarmes, bajar la edad de imputabilidad no son otra cosa que medicamentos equivocados dentro de un diagnóstico tan cómodo como tramposo.
Cuando se afirma que nuestra democracia es adolescente se la desea presentar como una criatura carente de anticuerpos y ciertamente minusválida. Sistema que no puede ni debe ser sometido a prueba, sistema que no se debe cuestionar, sistema al que nada se le puede objetar por presentar riesgos históricos demostrables.
En mi opinión los sistemas no tienen edad ni van mejorando con los tiempos. La democracia más experimentada del planeta nos presentó un dirigente de la talla de George W. Bush . Sus políticas internas y externas han sido lamentables en ambos sustratos siendo víctimas de ellas tanto propios como extraños, debido a la indudable y triste incidencia que tiene EE.UU a nivel mundial. Los tiempos cambian y como consecuencia los problemas. La soluciones de ayer no tiene porqué resolver los desafíos de hoy. Lo cierto es que difícilmente puedan lograrlo. Esgrimir como dato importante que uno de los trastornos es la juventud del sistema es todo un síntoma de conformismo y holgazanería intelectual. 
Uno de los fracasos más notables de nuestro sistema democrático lo indica el recurrente sofisma amenazador que como espada de Damocles nos recuerda a diario que esgrimir nuestras quejas y necesidades es una bendición divina. Sofisma desde lo conceptual. La democracia incluye necesariamente la libertad de expresión; no como don y gracia, sino como característica visceral. El piso como techo presentado por aquellos que desean convencernos que esa es la mayor aspiración posible. “Más que por la fuerza, nos dominan por el engaño”, afirmaba Simón Bolívar. La verdadera democracia es un auténtico sistema revolucionario, de sesgo jacobino si se profundiza, en donde las variables sociales deben estar sujetas a estudio y debate permanente. El Hambre, el cuidado de los recursos naturales, la salud, la educación, la cultura, el trabajo, es una batería de urgencias inexcusables. En el debe y el haber de nuestro arqueo es donde vemos reflejado la eficiencia del sistema; ni en su edad, ni en su evolución. Es la resultante de lo que en 30 años supimos construir.

“El héroe verdadero de El Eternauta es un héroe colectivo, un grupo humano. Refleja así aunque sin intención previa, mi sentir íntimo: El único héroe válido es el héroe en grupo, nunca el héroe individual, nunca el héroe solo”

                                             Héctor Germán Oesterheld

EDITORIAL PROGRAMA SABADO 26 LADORREGO AM 1470


" HUELE A FALTA DE ENJUNDIA"
por
Carlos Madera Murgui

 Tiempos de rara felicidad , aquellos en los cuáles se puede sentir lo que se desea y es lícito decirlo “. Esta frase del historiador romano Cornelio Tácito, que no llamaría la atención aparecida en el diario de hoy ,por el contrario, coronaba cada una de las ediciones de La Gazeta de Buenos Aires, primer periódico patrio y portavoz de los actos de gobierno, difusor de los valores e ideas de la revolución. Lo que hoy sería tildado como oficialista tenía nada menos que a Mariano Moreno, como artífice principal y la tarea de contrarrestar la labor de publicaciones inglesas que demuestran el poder de la prensa , yá en esa época. La identificación del opinante, crítico, comentarista, agrega lo que sí , respeto o rechazo con un condimento accesorio , siempre inseparable, que supone el conocer nombre y apellido. No obstante, no agrega mucho a la substancia de la cosa o el asunto en cuestión si se le considera atención. La indisimulada marca pueblerina, nuestra, de no construir una causa común, con el pelo en la leche de todos los tarros y siempre en el inconformismo propio de una población que no se decide, que critica , pero no se involucra, que putea por que no tiene, y putea cuando tiene pero tendría que haber sido de otra manera. Que siempre los mejores son los que no están, lo que equivale a decir que nunca estamos bien con quien nos gobiernan, pero que a su vez defenestran los métodos, los únicos que existen, los que sí permiten elegir. Están los que se centran en los políticos y no en la política; los que hablan de administrar y no gobernar, como sí la satisfacción a la espera de una necesidad se curara con una explicación o un número; los que basados en esto último desechan acciones que no rocen su impoluta compostura , que lejos de ser política, huele a falta de enjundia, entraña o espíritu para errar una y mil veces, pero intentar movimientos fieles a su pensamiento, que si alguna vez existió nunca lo pusieron en práctica. Y nos cabe a todos por error u omisión; no imperan excusas, ni para los que ejecutan, ni para los que militan, ni para los que votan, ni para los que opinan, ni siquiera para los que miran. Lasitudes, angustias, privaciones , alteraciones parecen determinar un ánimo cuasi permanente en el decir diario de los dorregueros, que salvo un puñado de personas, que demuestra compromiso, coraje y recoge seguramente incomprensión a lo largo de los años, se involucra en temas comunes a todos, con errores y desaciertos que otros jamás cometerán, porque la miran de lejos, para luego criticar. Nuestro partido de Coronel Dorrego, no responderá positivamente a la lógica y renovada expectativa de su gente, si no empezamos por saber dónde estamos parados, quienes sómos , cómo podemos fomentar nuestro desarrollo. Nos hace falta un necesario debate político, serio, con el aporte de ideas constructivas, lejos del mezquino oportunismo electoral, porque todos sabemos lo que necesitamos o quisiéramos tener, lo que no sabemos explicar cómo lo podemos conseguir o si es posible. ¿ Cuándo será el día, que alguien que no pretende ser elegido para nada, o que sabe que no va a ganar elecciones, se decida más que a opinar sobre lo hecho, a decir que debería hacerse y cómo. Va para cualquiera, personas o entidades que dicen querer a este partido, y que trabajan a diario, porque todos y los otros, somos nosotros. Partidos políticos y sus juventudes que dicen tener, que se expidan permanentemente, conformando mediante sus representantes y adherentes , oposición seria con enfoques elaborados, que no acostumbren a un gobierno a creer estáticamente que está obrando de forma correcta, y manejarse solamente con las escasas opiniones de los propios que siempre resultan incompletas, limitadas y halagadoras. No vivamos lamentándonos ni envidiando partidos vecinos, somos distintos, con otras necesidades y perspectivas, de nosotros depende, somos un pueblo chico con poca gente, podemos mejorar, debemos mejorar, despertemos sin dejar de soñar en que podemos.

lunes, 21 de octubre de 2013

Entrevistas del sábado 19 de octubre

Por último, entrevistamos a Hugo Segurola, de Juntos por Dorrego en ocasión de la "caravana del optimismo" realizada por ese partido.

Entrevistas del sábado 19 de octubre

Entrevistamos además, a Carmen Iribe precandidata en las PASO por el GEN, en la interna del frente progresista, civico y social
y tras no convenir con el radicalismo , no participará en las próximas elecciones. Sus apreciaciones a un click:

Entrevistas del sábado 19 de octubre

Entrevistamos al Ingeniero Guillermo García y al médico veterinario Martín Callejo de la empresa FEN HUE S.A. Esto nos decían: Primera parte: Segunda parte:

domingo, 20 de octubre de 2013

EDITORIAL PROGRAMA SABADO 19


" Nadie conoce, ni siquiera imagina el lugar del otro"
por
Carlos Madera Murgui

Pese a que no giramos en torno a premios entre decenas de programas de radio, vale sí recordar que la invitacion bien disfrutada aquella vez, apuntò en el rubro Opinión. Al ser específico casi en este y cualquier caso lleva a opinar lisa y llanamente. Al reflexionar sobre ello, reafirmo mi apreciación sobre lo difícil que presupone expresarse públicamente en nuestro medio y no hablo de la necesidad de coincidir, solo de incrementar la cantidad de voces y posiciones que realimenten conclusiones adultas sobre temas que nos interesan a todos. Me pregunto cuál es la razón que determina a cierta gente a afirmar que la marginación , pobreza , delincuencia , se afirma en un principio de educación, apareciendo dicha sin más aditamentos, como una verdad de perogrullo . Lo interesante es escuchar argumentos que cimienten la facilidad con lo cual se pretende minimizar una ciclópea tarea de casi siempre y no de casi todos. Las prioridades gubernamentales en todos los niveles cambian inexorablemente entre quienes llevan adelante esa labor, por la forma, y fundamentalmente por el convencimiento que se elabora en la ocupación. La inequidad , especie totalmente cercana a la injusticia y también en las antípodas de la vida normal o justa para todos, es tratada siempre desde la comprensión y discernimiento ideológico de quién o quienes tienen esa responsabilidad. Estaría casi demás decir que una persona con educación básica, desde el momento de haber accedido a ella, presupone un juicio, una razón para enfrentar entre otras cosas, su forma de vida, y de pensar su futuro, el inmediato , con la panza no del todo vacía . El basamento de todo ello , comienza contrariamente a lo que creen muchos, en sobrevivir la diaria, porque sin hoy, no hay mañana. Mucho se ha hablado sobre la Asignación Universal por Hijo, aunque poco se ha dicho, de lo que sucede con esta medida en el marco de un país federal y atendiendo al proceso histórico. En este sentido, la medida se sitúa en el marco de un nuevo paradigma que en la política social de la infancia se está gestando especialmente desde 2003 en adelante : el paradigma de la protección ampliada de la infancia. Cada una de las formas con la cuál es analizada e ideológicamente tratada trae consigo una determinada definición, que no se separa de la cuestión social en general y un tipo de políticas particular, manifestándose esto en la fisonomía del estado, y el bienestar y calidad de vida de los ciudadanos, ahora sí especialmente de la infancia. Ya en 1919 una innombrable ley consideraba al niño pobre como una amenaza o patología individual y objeto de tutela del Estado, pero a ser atendido focalmente por instituciones que sabían de que se trataba. Fue así que se reforzaron tribunales de menores, hogares y casas del niño, orfanatos, consejos de la minoridad, tribunales, todos velando por la seguridad ……de los demás ,no de los menores. El concepto de niño pobre como amenaza se profundizo en los 70 y se observa aún hoy en los debates de imputabilidad o no de los menores. Avanzamos algunos casilleros muchos años más adelante cuando descubrimos el menor a formar y a ser sociabilizado por la familia y la educación. Esto planteó políticas más distributivas con derechos a seguridad social a las familias asalariadas, desarrollandosé desde allí las asignaciones familiares. Hasta allí , mediados del siglo XX todo apto para el modelo de familia tradicional de núcleos de aquel entonces, pero no para hoy, donde existen múltiples formas de familia, gran parte de las mujeres trabajan, la que no está sola ,donde hay distintas familias e infancias y la misma ya no solo es sociabilizada por la escuela y el grupo de pares. La mínima expresión de la función distributiva del Estado ,la vivimos en los 90,donde la Nación en especial, se desligó de su rol como nivelador de inequidades en el marco de un país en directo rumbo a la disgregación de casi todo lo que nos atravesó luego. La gestación de un nuevo paradigma en la política social argentina, portando una concepción de lo considerado justo en la infancia y las consiguientes políticas que la acompañan comienzan a tener reflejo en la estructura institucional del Estado, con la clara modificación de políticas históricamente sectoriales y no para unos pocos y con la articulación de variados programas, articulando una mejor y muy superior asignación de recursos. La contundencia de los datos, de los que algunos descreen ,reafirman de todas formas una realidad mejorable, pero nunca discutible desde lo medular, suena casi descolocado , no aportar hacia adelante. Aparecen junto a la AUH, y en un importante cambio en el alcance de la función distributiva del Estado ,la sanción de una nueva ley de educación nacional y en las provincias, el Plan Nacer en materia de salud, la sanción de la ley nacional de protección y promoción de los derechos del niño y derogación de la ley de patronato de 1919, la restitución de los consejos de salarios y la asignación por maternidad entre otras. La desigualdad social y también geográfica sigue constituyendo una problemática estructural en el país, por ello es imprescindible reflexionar atendiendo al proceso histórico argentino en el cuál se inscribe la AUH. Sobre todo, para no volver atrás y mejorar de manera continua el nuevo escenario en gestación. El mundo discute la inequidad y la justa vida para todos, se le reclama a los Estados . La economía de mercado, no repara en las personas, menos aún en la infancia, nuestro Estado se está ocupando hace tiempo de lo que el mundo habla, nadie puede repetir “ me pongo en tu lugar “, nadie conoce , ni siquiera se imagina ,el lugar del otro, del que necesita. Eso solo lo cubre el principio de prioridades que abriga ideas basadas en el desarrollo humano delante de todo, pero fundamentalmente para todos

lunes, 7 de octubre de 2013

Entrevistas del sábado 5 de octubre

El mismo sábado 5, mantuvimos una cálida charla telefónica con la poeta dorreguense LAURA FORCHETTI, quien presentó su libro "UN OBJETO PEQUEÑO" junto a la coautora, la artista plástica GRACIELA SAN ROMAN, en el Centro Cultural de la Cooperación en
Capital Federal. La muestra de objetos y algunos poemas que componen el libro permanecerá montada por un mes.

Entrevistas del sábado 5 de octubre

Entrevistamos en el piso de La Dorrego a HUGO JUAN DE COS, escritor, periodista, ex bancario, desde hace 20 años a cargo de la division cultural de la Cooperativa Eléctrica de Coronel Dorrego. Primera parte: Segunda parte:

sábado, 5 de octubre de 2013

COLUMNA DEL SABADO 5





Un dia en la Vida
por 
Gustavo Marcelo Sala
www.lasbalas del campanario.blogspot.com



1983-30 DE OCTUBRE-2013
Hace 30 años y por primera vez apreciaba esa enorme sensación que significa intimarse y hacerse responsable por un modelo de país, por un proyecto colectivo. Por entonces, con poco más de 20 años, sólo poseía una marginal y acotada experiencia militante cuando las elecciones universitarias de Filosofía y Letras, incluyendo alguna participación en las listas de la agrupación estudiantil del Frente Universitario Nacional y Popular, conocido por entonces con la sigla FUNAP.

Recuerdo que aquella mañana de fiesta cívica y emotiva fui bien temprano, preparado desde el día anterior, con mi boleta pronta para que se deslice dentro de la urna y ser uno más, un par entre pares, un igual entre iguales, un voto entre millones.

Sospecho que el sobre, pletórico de fe y convicción ideológica, quedó mimetizado entre cientos que albergaban mis mismas esperanzas. Alende-Viale fue mi firme decisión. Desde hacía un par de años consideraba al Partido Intransigente como la opción popular y democrática que con mayor claridad presentaba un modelo inclusivo de neto corte social.  Esta característica, más su postura inflexible con relación a los crímenes de la dictadura cívico militar (única agrupación que por ese entonces hablaba en dichos términos), conformaron un paquete que me ilusionó a favor de aquella incipiente militancia universitaria mencionada.

Antes de esto, por el 81, a instancias de un amigo, había asistido a un par de reuniones de la Junta Coordinadora, agrupación Radical de jóvenes adultos que por aquellas épocas ya trabajaba decididamente dentro de Renovación y Cambio bajo el paraguas de la enorme figura del Doctor Raúl Alfonsín como líder indiscutible e indiscutido. Me consideraba un Radical populista, no gorila, de modo que observaba con marcado disgusto esa demonización que en dichos cónclaves se hacía del peronismo. Un peronismo impresentable desde luego y muy ligado a la derecha dura  lopezrreguista, pero no era menos cierto que dentro del Radicalismo también moraban cientos de colaboracionistas del “proceso” que obtuvieron buenos réditos políticos por el simple hecho de haberse desligado de la dictadura en el momento oportuno.

Me daba mucha pena que un tipo como Alfonsín, a quien admiré y aún admiro, estuviera rodeado de sujetos tan siniestros, personeros que guardaban mucha similitud a aquellos antagonistas criticados en esos foros.

Semanas antes de los comicios la mayoría de las encuestas, precarias por entonces, daban ganador a la fórmula encabezada por Luder, sospecho que por aquello del carácter invencible del peronismo, aunque en la calle, en la universidad, en el trabajo, uno percibía otra sensación. Una llamativa horizontalidad en donde las clases medias, los sectores estudiantiles y una buena base de los trabajadores consideraban al líder Radical como el hombre indicado para el momento.

A pesar de mis prevenciones fui a escucharlo a Ferro y puedo asegurar que su discurso me conmovió, aún cuando estaba en desacuerdo en varios de sus tópicos políticos. Ya me había ocurrido algo similar con Oscar Alende, con Conte Mac Donnell, con Carlos Auyero y con Alicia Moreu de Justo, pocos días antes, en el auditorio de Derecho, jornadas de debate organizadas por el Centro de Estudiantes de esa Facultad pública. Porque a contrapelo de la actualidad del centenario partido, el Doctor Raúl Alfonsín hablaba de política, y de política concreta. Su personalidad en el estrado y su retórica superaban largamente la imagen del resto de los competidores, oponentes muy preocupados por direccionar sus discursos en las glorias y luchas pasadas en lugar de proponerle esperanzas a los más de tres millones de tipos que nunca habíamos participado de las decisiones colectivas. Ese fue su tremendo acierto, destreza no casual, no fue una táctica electoral, no era necesario especular ni impostar, Alfonsín encarnizaba internamente ese modo de observar el futuro. Y una buena mayoría de esos tres millones de noveles ciudadanos que por primera vez sufragabamos le confiaron su porvenir.

A pesar de la sorpresa nocturna, no por el triunfo Radical, sino por la escasa adhesión que logró el PI (apenas poco más de trescientas mil almas), salí a festejar, embanderado con mis negros y rojos y con mis símbolos de pertenencia. Celebraba que un civil, que un demócrata, al cual respetaba ética y políticamente, sería el encargado de representarnos colectivamente en el marco de un segmento histórico altamente complejo, y estaba contento que fuera él quién sostuviera la misión.

Recuerdo que esa noche, a poco de andar por las calles de Flores, observé que cientos de miles de adherentes de todos los partidos estaban tan contentos como yo, agitaban sus banderas rojas y blancas, celestes y blancas, y vivaban por la llegada de un nuevo tiempo, entendiendo que dentro de la democracia lo que no se da en la coyuntura encierra múltiples factores que es preciso analizar, mensajes que es necesario saber leer para mejorar y tratar de persuadir al pueblo que, en un futuro no muy lejano, podemos constituirnos también como una buena opción de  gobierno.

Y así comenzó este nuevo tiempo. Es probable que como sociedad muchas de aquellas cuestiones pendientes no las hayamos podido resolver, sobre todo los límites que debemos ponderar con relación a nuestros egoísmos ilegítimos. Si bien la noche de la dictadura cívico militar fue oscura y dramática, no es menos ciertos que nuestros vicios sociales han colaborado por sobremanera para que determinados valores democráticos aún permanezcan difusos. Vicios e irrespetos institucionales que inclusive se llevaron puesto, pocos años después, a ese enorme estandarte de la democracia que fue el propio Doctor Raúl Alfonsín. Figura olvidada por propios y extraños durante la negra noche liberal, emblema político colocado en su justo término, en vida y sin tardíos epitafios por un Gobierno Nacional y Popular.





EDITORIAL PROGRAMA SABADO 5

"Nuestras facultades de decidir en libertad, ya no seran encorsetadas por nadie"

por
Carlos Madera Murgui


Una masa crítica de ciudadanos bien informados, suficientemente numerosa y comprometida, molesta y entorpece el accionar de determinados grupos con autotitulación de superlativos doctos de la política pública, creídos de poseer un saber moral superior y sumos conocimientos específicos de lo que constituye el bien común. Obedecer, pasivizarse , someterse, desalentar la participación, convertir la población en un rebaño ,conforman el libreto diario de creerse en supremos en eso de entender a la “gente”, arrogarse saber de lo que quiere hablar la sociedad, desalentar  el protagonismo, la creatividad, la opinión , la diversificación, se debe dejar en manos “ de los que pueden” “ de los que saben” “ de los que mandan”, sus grandes o pequeños problemas.
La participación es un instrumento privilegiado de la democracia , a la que reprimen los autoritarios, porque involucrarse es ser cotidianamente protagonista de su destino. Quién participa , en pleno estado de derecho desempeña un rol activo, piensa por sí mismo, crea, influye y desarrolla su responsabilidad. ¿Que significa ser protagonista de su destino? Es la libre elección de sus gobernantes que se interesen en el gobierno individual de cada uno , el derecho primordial es el social, liderado por la inserción, como oportunidad. Más allá del derecho a la subsistencia, procura dar forma al derecho a la utilidad social , considera individuos como ciudadanos activos y no asistidos a los que hay que auxiliar. No sólo vivir, sino vivir en sociedad. Relegar o postergar la búsqueda de soluciones a los problemas más agudos que tienen sectores desposeídos es temerario, injusto e ideológico. La errónea idea que la economía sea independiente de los conceptos y doctrinas de los distintos gobiernos , colisiona frontalmente, por lo que vale la pena recordar, que esos gobiernos son producto de la preferencia de los electores. Cuanto menos gobierne el gobierno “ mejor le irá al libre mercado”, la eficacia de este último se reduce cuando se intenta satisfacer la demanda social de la redistribución.
Está implícita la idea de considerar cualquier regulación del Estado vinculada a la búsqueda de la igualdad, como atentatoria de la libertad, de todas.
Porque seguir acordándonos de cosas que pasaron hace varios años? La democracia heredó desigualdad, miseria, desaparecidos, analfabetos, oprimidos, silencios, muerte, marginación. El sistema no lo ha conseguido revertir en su totalidad, también es cierto que no todos quienes gobernaron en esta etapa,tuvieron la misma convicción sobre la inclusión. Se trata de haber reformulado la noción de igualdad social como capacidad contínua e igual de acceso a los servicios colectivos, ya se trate de vivienda, educación, transporte , salud, empleo. La experimentación de nuevas formas de oferta pública de trabajo, son valederas en la búsqueda de un espacio intermedio hacia el salario seguro y permanente. Nada es fácil, cuando todavía existen preconceptos, discriminación, intolerancia y el convencimiento que las oportunidades de una vida mejor solo están reservadas para quienes se lo merecen. No se aclara quien determina esto último.
De lo que sí deberemos estar bien seguros , es que nuestras facultades de decidir en libertad, ya no serán encorsetadas por nadie. Las acciones que rigen nuestros días, gozan para siempre de una diversidad de opiniones que incluyen a todas ,y en ese marco de pleno estado de derecho, vivimos de otra forma, donde todos partimos del mismo sitio, aunque a muchos les moleste.
Esto también se elige, no lo pierdan de vista.
La convivencia y el debate diario por una sociedad más ecuánime en libertad , con igualdad ,en democracia solo es capaz de defenderse a sí misma si incrementa sus capacidades de reducir la injusticia y la intolerancia, y por ende , la violencia.