Información, que le llaman
Por Carlos Madera
No es porque nadie se acuerde, que por eso no se habla o aborde determinado asunto que fue tapa por llamarlo de alguna manera por trascendencia del día, semana o de un viaje a La Plata. No existe un listado, ni tampoco innumerables temas de los cuales se ha hablado, prometido o dado por sentado y con el paso del tiempo o se quedó en el olvido o se reverdece cuando todos se ocupan de lo que no se ocupan nunca. Solo quienes aparecen como beneficiarios o potenciales usuarios de una mejora u obra o quienes siguen padeciendo la falta de la concreción de la misma son los que mantienen la llama viva. Todo tiene una explicación y nadie duda de ello, lo que sí debería ser refrescada a la población cuando se trata de demoras o bien gestiones que parecían haber dado frutos y luego las circunstancias con las aclaraciones pertinentes, demuestran que no fue así. Es bien cierto, que los movimientos locales y sus realizaciones en materia de obras que demanden estudio, proyecto e inversión de cuantía y aún mas cuando la competencia oficial excede el movimiento, depende siempre de escalones de gobiernos superiores. La gestión municipal y su seguimiento, además claro, de la información general sobre esos pasos debería ser moneda corriente en la relación gobernante-gobernado. El acceso Norte a la ciudad cabecera del partido de Coronel Dorrego, empalmado por la ruta provincial 72 y caminos vecinales es hoy testigo de los que nos ocupa. Un anuncio de algunos años, no muchos pero suficientes, en promesa de concreción anunciada por el Intendente municipal, por traslado en la decisión de la ministra Cristina Alvarez Rodriguez, competente en ese tipo de obras, hablaba de un trabajo de alteo, consolidación, desagues y asfaltado en lo que une la ruta provincial y el vivero Cristobal Hicken en el extremo de la calle Rubén Alvarez. Pasó el tiempo, no volvió a inundarse el sector como la vez que precipitó el anuncio, pero no sólo su aspecto, sino su transitabilidad atentan con una invitación de entrada como muestra cualquier lugar poblado, además de la nula señalización (sólo un semáforo) que indique el ingreso a una ciudad. El muy cercano enclave de la planta de asfalto municipal, promueve el comentario obligado. Si bien quienes sabemos, no tiene relación inmediata ni directa, origina un inmediato razonamiento erróneo y negativo. No tiene relación el fenómeno de los cardos ruso acumulados frecuentemente con lo comentado, eso solo ayuda para una versión de postal del lejano oeste norteamericano. Que nadie se moleste, entre tantos susceptibles, solo necesitamos saber qué fue de aquel anuncio y mejorar uno de los frentes de la casa, la de todos. Que se desfinanció el proyecto es casi previsible, habrá que insistir, de eso se trata.
No es porque nadie se acuerde, que por eso no se habla o aborde determinado asunto que fue tapa por llamarlo de alguna manera por trascendencia del día, semana o de un viaje a La Plata. No existe un listado, ni tampoco innumerables temas de los cuales se ha hablado, prometido o dado por sentado y con el paso del tiempo o se quedó en el olvido o se reverdece cuando todos se ocupan de lo que no se ocupan nunca. Solo quienes aparecen como beneficiarios o potenciales usuarios de una mejora u obra o quienes siguen padeciendo la falta de la concreción de la misma son los que mantienen la llama viva. Todo tiene una explicación y nadie duda de ello, lo que sí debería ser refrescada a la población cuando se trata de demoras o bien gestiones que parecían haber dado frutos y luego las circunstancias con las aclaraciones pertinentes, demuestran que no fue así. Es bien cierto, que los movimientos locales y sus realizaciones en materia de obras que demanden estudio, proyecto e inversión de cuantía y aún mas cuando la competencia oficial excede el movimiento, depende siempre de escalones de gobiernos superiores. La gestión municipal y su seguimiento, además claro, de la información general sobre esos pasos debería ser moneda corriente en la relación gobernante-gobernado. El acceso Norte a la ciudad cabecera del partido de Coronel Dorrego, empalmado por la ruta provincial 72 y caminos vecinales es hoy testigo de los que nos ocupa. Un anuncio de algunos años, no muchos pero suficientes, en promesa de concreción anunciada por el Intendente municipal, por traslado en la decisión de la ministra Cristina Alvarez Rodriguez, competente en ese tipo de obras, hablaba de un trabajo de alteo, consolidación, desagues y asfaltado en lo que une la ruta provincial y el vivero Cristobal Hicken en el extremo de la calle Rubén Alvarez. Pasó el tiempo, no volvió a inundarse el sector como la vez que precipitó el anuncio, pero no sólo su aspecto, sino su transitabilidad atentan con una invitación de entrada como muestra cualquier lugar poblado, además de la nula señalización (sólo un semáforo) que indique el ingreso a una ciudad. El muy cercano enclave de la planta de asfalto municipal, promueve el comentario obligado. Si bien quienes sabemos, no tiene relación inmediata ni directa, origina un inmediato razonamiento erróneo y negativo. No tiene relación el fenómeno de los cardos ruso acumulados frecuentemente con lo comentado, eso solo ayuda para una versión de postal del lejano oeste norteamericano. Que nadie se moleste, entre tantos susceptibles, solo necesitamos saber qué fue de aquel anuncio y mejorar uno de los frentes de la casa, la de todos. Que se desfinanció el proyecto es casi previsible, habrá que insistir, de eso se trata.
Dorrego Despierta se emite de lunes a viernes de 7 a 9 hs por La Dorrego AM 1470
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