por Carlos Madera Murgui
Parecería que ya no
queda mucho para decir, que ya todo está escrito, dicho, reporteado. Sin
embargo, todos tenemos algo aunque se considere pequeño, para sumar. Acaso lo
esencial de este trabajo sea la comparación y el análisis de las distintas posiciones,
si da para que haya varias. La propia siempre funciona o nos parece, la obra
maestra e impulsar a los oyentes, que al menos, sin ser la gran rapsodia, que
tampoco aparezca relegada como sin sentido. He dado a conocer, hablo por este
programa y el de los sábados, una clara, me parece, posición en cuanto a lo
discutido en las últimas semanas sobre la suspensión temporaria ( eso dicta la
norma), hasta que se sepa algo más, de radicaciones de venta de variados
artículos en superficies mayores a los 150 metros. Lo espeso de la discusión
deriva o debería centrarse en los cimientos de una opinión, porque desde allí, luego, pasamos a escenarios, que fluctúan en
posiciones que no compatibilizan demasiado sobre lo que se escucha después.
Varían desde la defensa de los pequeños comerciantes, luego sobre la regulación
de los precios, los controles , las normativas, pasando por las inevitables e
históricas compras fuera de la ciudad, el fundamento de la libertad del
consumidor, la generación de empleo, la actividad de los proveedores; es decir,
ingredientes directos e indirectos que afectan o favorecen, según la mirada. En
esta mañana, me permito agregar algo mas al abanico de opiniones, que ha
alimentado fervorosamente el debate que se debió o el que esta por venir, como
quieran, al cual se dio de hecho, que están invitado todos. El fin de semana,
viernes, sábado y domingo, también el anterior, fueron para la ciudad cabecera,
por lo que se vio, días fructíferos en
la convocatoria, con afluencias de público muy interesantes en variadas ofertas
sociales. En la base de esas organizaciones, aparece como obvio, la ocasión
para que sea la actividad anual y por lo pronto la oportunidad para reafirmar
tareas y presencias del todo el año. En ese marco no son ajenos proveedores,
medios, dirigentes, acciones que llevan a logros como los que asistimos. Hubo
muchas cosas en Dorrego el fin de semana, y por lo visto y escuchado, todo
anduvo bien.
Apunta el comentario, a todos y a ninguno,
solo pretende recordar una vez más que todos los pobladores, al menos a los
hechos me remito, apoyan sin retaceos
las organizaciones de las instituciones locales. Me pregunto si esas
organizaciones, y solamente hágase cargo quien le corresponda, adquieren y compran todo
lo ofrecido en esas actividades en el pueblo, aunque, y atento a lo que digo,
les cueste un poco más caro aquí que afuera. Solo lo pregunto, porque esto es viejo;
importantes compras se realizan fuera de la ciudad, que cobija, colabora y da
vida a esas instituciones, que también forman parte de eso que hay que cuidar.
Una emblemática anécdota de un comerciante de Dorrego, hace muchos años ya,
recuerda que alumnos de un instituto educacional le lograron vender medio
talonario de una rifa de un calefactor que terminaron comprando en Bahía, y que
él mismo vendía en ese negocio. Obviamente la ofuscación del comerciante acabó
juntamente con su colaboración.
Que yo sepa, a no todos
alcanza la foto, cada cual sabrá lo suyo.
Debemos hablar de todas las situaciones todas,
todo tiene que ver, es lo que se me ocurre para terminar la tapa de hoy.
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